Thursday, January 05, 2017

FINANZAS POPULARES, ECONOMÍA SOLIDARIA, COOPERATIVISMO Y DESARROLLO SOSTENIBLE

Sabemos que, en el ámbito de las finanzas populares y la economía solidaria, el comercio justo es uno de los pilares en el mundo. No obstante, tenemos la necesidad de incorporar aún más el desarrollo sostenible a todos los niveles, integrando y articulando sus aspectos económicos, sociales y ambientales. Diversos estudios sociales han comprobado que, por ejemplo, el cooperativismo, se fortalece más cuando hay una crisis financiera. Los países europeos, asiáticos y los Estados Unidos han vivido esa experiencia. En España, se crearon más puestos de trabajo en plena crisis financiera.

Precisamente, las crisis financieras, la escasez de alimentos, los problemas que trae consigo el cambio climático, la pobreza que cada día crece más en el mundo, y el aumento de las desigualdades plantean nuevos desafíos, pero al mismo tiempo diversas interrogantes, que aún no tienen respuestas concretas.
En el mundo, obviamente cada vez más “competitivo” y globalizado, existen serias críticas a las estrategias de crecimiento patrocinadas por los organismos multilaterales de crédito. Incluso, a pesar de las variadas recomendaciones de las organizaciones internacionales, los estados no están cumpliendo sus partes, o simplemente, no saben hacer las cosas.
En este mundo de constantes cambios, y donde sólo es permanente el cambio mismo, se ignora cuál es el norte a seguir. La cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC por sus siglas en ingles) que se realizó en Lima, tuvo como finalidad encontrar algunas respuestas a las preguntas. Hay quienes creen que, así como está la situación mundial, la reactivación económica demorará un buen tiempo.
Desde esta perspectiva, el desarrollo sostenible juega un rol muy importante. Urge fijar agendas para trabajar temas vinculados con el desarrollo económico, social y ambiental.
Por esa razón, el Banco Mundial reclama una prosperidad compartida para “corregir” la desigualdad. Es decir, los gobiernos deben centrarse en la prosperidad compartida para corregir la desigualdad social y combatir de esa manera con la pobreza. El propio Jim Yong Kim, presidente del Grupo del Banco Mundial, se inclina por el crecimiento económico inclusivo, razón por la cual pidió a los diversos gobiernos, corregir la creciente desigualdad, esforzándose para impulsar la "prosperidad compartida, especialmente, por mejorar la vida del 40 % más pobre de la población de los países en desarrollo”.
Pero, ¿será eso la solución? Kim afirma que “en nuestro trabajo con los gobiernos, respaldamos los esfuerzos destinados a garantizar que todos se beneficien con el crecimiento, no solo aquellos que ya controlan el capital o tienen acceso a él”.
Olvidamos que las 85 personas más ricas del mundo controlan tanta riqueza como el 50 % más pobre de la población mundial, o sea, más de 3,500 millones de personas.
Para el presidente del Banco Mundial, resulta más eficaz corregir la desigualdad adaptando las políticas a la situación de cada país para ayudar al 40 % más pobre de la población.
¿Qué pasará con las naciones de ingreso bajo, donde el principal problema es la productividad agrícola?  ¿Quizá un país de ingreso mediano su fortaleza será la urbanización, es decir, crecer verticalmente? ¿En los andes de Suramérica y en el Caribe, donde la mayoría de los niños no asiste a la escuela primaria, cuál sería el enfoque y qué pautas se deben seguir?
En Perú, por ejemplo, uno de los principales problemas sociales es la falta de empleo digno que ayude a combatir la delincuencia en todas sus formas, y revierta los bajos niveles de escolaridad. ¿Qué se debe hacer en el Perú, donde hay subempleo, autoempleo e informalidad?
Sabemos que algunas empresas no honran sus deudas fiscales y evaden impuestos. La corrupción forma parte del quehacer humano y eso, perjudica directamente a los más pobres.
DESARROLLO DEL MILENIO
Estamos viviendo frente a los desafíos que traen los “Nuevos objetivos del desarrollo sostenible” que insta a las economías del mundo, reducir la pobreza en el año 2030.
Efectivamente, como no se pudo alcanzar los “Objetivos del Milenio” que estaban relacionados con el desarrollo social sostenible, la “Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, adoptada por las Naciones Unidas, contempla una nueva estrategia con 17 objetivos que se deben cumplir en los siguientes 14 años.
La nueva estrategia regirá los programas de desarrollo mundiales durante los próximos años, donde la meta es el año 2030. Los estados se han comprometido a movilizar los medios necesarios para su implementación mediante alianzas centradas especialmente en las necesidades de los más pobres y vulnerables.
Precisamente, entre los nuevos objetivos están los principios del cooperativismo, economía solidaria y finanzas populares. Por eso es que iniciamos esta nota con el llamado “precio justo”.
Mientras que se sigue el curso de los “Nuevos objetivos del desarrollo sostenible”, que se inició el año pasado, preguntamos: ¿Qué se está haciendo? ¿Qué políticas económicas, sociales y ambientales que contribuyan con el desarrollo sostenible se están aplicando?
Aunque pareciera contradictorio, al interior de las organizaciones multilaterales de crédito, como el Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Corporación Andina de Fomento y Banco Interamericano de Desarrollo, hay experiencias comprobadas acerca del éxito que tiene la economía social solidaria.
Un texto de las Naciones Unidas afirma: “… podemos aprender lecciones importantes del campo en expansión de la economía social y solidaria. Esto incluye las experiencias de millones de productores, trabajadores, ciudadanos y comunidades de todo el mundo que tratan de aumentar la seguridad de sus medios de subsistencia, de ejercer sus derechos y de transformar los modelos de producción y consumo mediante varias formas de cooperación, solidaridad y autoorganización democrática”.
Cito el texto literalmente: “La economía social y solidaria enfatiza también el papel de la ética en la actividad económica. Muchos gobiernos empiezan a reconocer la necesidad de democratizar los sistemas económicos y de gobernanza, reconociendo así los papeles no solo de los actores públicos y privados, sino también de las organizaciones e instituciones comunitarias y colectivas al igual que la importancia de las alianzas intersectoriales”.
Para que el lector recuerde, los “Nuevos objetivos del desarrollo sostenible” son:

1.    Fin de la pobreza.
2.    Hambre cero.
3.    Salud y bienestar.
4.    Educación de calidad.
5.    Igualdad de género.
6.    Agua limpia y saneamiento.
7.    Energía asequible y no contaminante.
8.    Trabajo decente y crecimiento económico.
9.    Industria, innovación e infraestructura.
10.  Reducción de las desigualdades.
11.  Ciudades y comunidades sostenibles.
12.  Producción y consumo responsable.
13.  Acción por el clima.
14.  Vida submarina.
15.  Vida de ecosistemas terrestres.
16.  Paz, justicia e instituciones sólidas.

17.  Alianzas para lograr los objetivos.

FIRMADOS Nro 209
LIMA, enero 2017

No comments: